Cambio en el sistema educativo…¿otra vez?

En este artículo de opinión, no vamos a posicionarnos sobre la idoneidad de uno u otro sistema educativo sino que vamos a tratarlos desde el concepto del cambio. Por ello le hemos titulado: Cambio en el sistema educativo…¿otra vez?.

Se trata de discernir lo bueno de lo mejor. Creemos firmemente que en este caso quizás lo mejor sea enemigo de lo bueno. Está claro que el sistema educativo que tenemos implantado hoy en día en nuestro país tiene sus orígenes donde y como los tiene, no vamos a repasar aquí las formas en las que se aprobó ni por quien ya que no queremos mezclar política con educación aunque en este caso vayan tan de la mano y además desde nuestro punto de vista, carece de una visión actualizada de las necesidades de nuestros alumnos por no hablar de otros muchos factores que creemos que merman la calidad del mismo.

Sin embargo, que después de las elecciones estemos viendo como ya empiezan las Comunidades Autónomas donde ha habido un cambio de gobierno significativo a anunciar sus cambios a 15 días de entrar en vigor los plazos que el anterior plan contemplaba y con ello, obligar a los profesores de los institutos y colegios de secundaria y bachiller a realizar el trabajo de 3 meses en 15 días… en fin, a veces lo bueno es enemigo de lo mejor. (Véase por ejemplo el caso de Aragón, donde el nuevo equipo de gobierno formado por diferentes grupos políticos se ha apresurado a poner en vigor su nuevo plan de educación)

En COESU Educación, somos defensores de un plan educativo que perdure en el tiempo, que sea flexible y permita realizar cambios de forma ágil y elástica, que esté por encima de cambios de gobierno… en  definitiva, de un sistema educativo que haga que nuestros alumnos mejoren su preparación para el mercado laboral y para los estudios superiores, que les haga estar a la altura de sus homólogos europeos y que simplemente vele por el interés de nuestros alumnos y no por cubrir los egos de los políticos que los aprueban.

Por ello, creemos firmemente en un cambio metodológico y en la utilización de la tecnología disponible. Creemos también que a nuestros alumnos no hay que enseñarles a memorizar sino a pensar, en que también debemos enseñarles a aprender, a madurar, a cooperar, a trabajar por proyectos, a resolver problemas creando estrategias que optimicen los recursos disponibles, a desarrollarse como personas….

Así es como planteamos nuestras clases extraescolares y nuestras actividades de ocio educativo. No decimos que este planteamiento que tenemos ahora sea el que deba perdurar durante los próximos diez años, por ello hablamos de flexibilidad y elasticidad en los sistemas educativos, pero somos conscientes de lo que el mercado laboral demanda actualmente y lo que el resto de países europeos están llevando a cabo con un criterio, bajo nuestro punto de vista, acertado.

Si quieres descubrir cómo trabajamos, contacta con nosotros. ¡Estaremos encantados de enseñarte nuestra visión de la educación y del ocio educativo!

Cogito ergo sum…